La nueva KTM 1390 Super Duke R es la nueva bestia de la marca naranja

Aprovechando los 30 años de la familia de modelos Duke, que se inició con el lanzamiento la KTM Duke en 1994, la marca ha anunciad el despliegue del que es, a todas luces, su modelo más prestacional. En los últimos años, el segmento hypernaked se ha hecho notar con creaciones verdaderamente extremas de diferentes fabricantes entre los que se cuenta la propia KTM, que ahora ha querido ir un paso más allá con la nueva 1390 Super Duke R -y su variante EVO-. La filosofía es la misma: ofrecer las mejores sensaciones deportivas en formato naked para no perder polivalencia.

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Carretera o circuito -o ambos escenarios-, pero también acudir al lugar de trabajo. La nueva KTM 1390 Super Duke R quiere hacer eso y mucho más. Sobre la anterior 1290 Super Duke R, evoluciona notablemente en términos de diseño. El cambio más evidente se aprecia en el frontal, donde la doble óptica recibe una nueva forma mucho más atractiva y ligera -pesa 700 gramos menos-, mientras que se rodea de nuevos alerones y un depósito nuevo con capacidad de 17,5 litros. Las luces de posición y de circulación diurna están situadas en el perfil del faro, cuya intensidad se ajusta automáticamente en función de las condiciones de luz.

La 1390 Super Duke R hace gala del bicilíndrico más potente de la marca hasta la fecha

El bloque bicilíndrico LC8 es la joya de la corona de la marca, y sobre su antecesora, experimenta ciertas mejoras para erigirse como la unidad más potente hasta la fecha. Los cambios se traducen en un diámetro aumentado en 110 mm para elevar la cilindrada hasta los 1.350cc. Además, se ha integrado un sistema Cam Shift en la culata para ajustar el tiempo apertura de las válvulas al régimen de giro correspondiente. Como consecuencia, se logra más respuesta y aceleración en toda la gama de rpm útiles, pero también permite la instalación de un mapa específico para la inyección para poder así cumplir con la normativa Euro5+.

El resultado son 190 CV a 10.000 rpm y un par máximo de 145 Nm desde las 8.000 rpm. KTM habla de ‘festival tecnológico’ para su 1390 Super Duke R y lo cierto es que razón no les falta. Una IMU de seis ejes se encarga de la lectura y gestión de todo cuanto acontece en la moto, permitiendo diferentes ajustes de parámetros como el control de tracción, el antiwheelie o el ABS, dependiendo del modo elegido. En este caso, la variante EVO se beneficia además de los modos Performance y Track actualizados, que incluyen cronómetro y estadísticas vuelta a vuelta, control de freno motor o un módulo de suspensión Pro.

El bastidor de tubos de acero sigue siendo la base de la parte ciclo de la 1390 Super Duke R, pero ahora se acompaña de una pareja de suspensiones WP semiactivas. Gracias a unas válvulas magnéticas controladas electrónicamente, la suspensión adoptará la configuración definida en los cinco modos seleccionables: Auto, Comfort, Rain, Street y Sport. Adicionalmente, la KTM 1390 Super Duke R EVO ofrece los modos de suspensión Pro, los cuales ofrecen tres configuraciones (Low, Standard y High) para la nivelación de la precarga del muelle.

Para el ajuste de la propia precarga, se basa en el peso del piloto y en tres geometrías predefinidas: Auto-Standard; Auto-Low y Auto-High. Asimismo, la horquilla delantera cuenta con una configuración específica antihundimiento para las frenadas más agresivas en circuito. Por último, la función Factory Start hace las veces de dispositivo holeshot de MotoGP, actuando en la precarga del amortiguador trasero después de las frenadas para ofrecer la mejor aceleración posible.

La máxima eficacia en frenada está asegurada gracias a las pinzas monobloque Brembo Stylema de cuatro pistones, las cuales muerden dos discos flotantes de 320 mm. Todo ello, operado por la bomba Brembo MCS. Detrás, una pinza de dos pistones se acompaña de un disco de 320 mm. Las llantas de 17 pulgadas se acompañan de unas gomas Michelin Power GP revisadas. Con medidas 120/70 y 200/55, estos compuestos para la 1390 Super Duke R son ahora 1,2 kg más ligeros.

Tampoco falta una pantalla TFT a color de gran tamaño con una toma USB-C para cargar dispositivos. Dispone de nuevos gráficos e información tan valiosa como la presión de los neumáticos. Las KTM 1390 Super Duke R -y EVO- también se ofrecerán en colores especiales por los 30 años de la saga Duke, que evocan el esquema naranja de la 990 Super Duke de 2005.