Fiat interesada en MV Agusta

 
El rumor corre por Italia con cierta insistencia. Fiat puede hacerse con la titularidad de MV Agusta, actualmente propiedad de Giovanni Castiglioni por herencia de su fallecido padre, Claudio.
 
El joven Giovanni le ha dado serio impulso a la empresa potenciando la gama de motos basadas en su brillante tricilíndrico. Las ventas crecieron un 15% en 2013. En el primer trimestre 2014 lo han hecho un 20%. La histórica marca de Gallarate, ahora radicada en la antigua planta fabril de Aermacchi, en Schiranna (Varese), está emergiendo de largos años de letargo y distintos propietarios. Entre ellos Harley-Davidson, a quien Claudio Castiglione recompró la sociedad y marca.
 
Claudio era un devoto de MV Agusta. Sentía profunda admiración y estima por la historia que encierra la marca más laureada del motociclismo italiano. Su propósito fue crear motos de alta calidad y gran rendimiento poniendo más pasión ilusión y cariño que objetivo lucrativo. Era un soñador a la italiana, con devoción por su marca y producto, con alto sentido de la calidad, la funcionalidad y la estética del diseño. Falleció poco antes de empezar a producir la F3 675 tricilíndrica. Con el prototipo ya terminado, le pronosticó sería el relanzamiento de MV Agusta. Acertó plenamente.
 
Su hijo Giovanni ha resultado ser muy buen gestor de la empresa que ha potenciado con amplia gama de modelos basados en el tricilíndrico. Gran acierto industrial. Las ventas en el mundo crecen. Los éxitos deportivos en el Mundial de SSP ya son una realidad. MV Agusta está más activa que nunca desde que salió de Gallarate, pero en su crecimiento requiere financiación crediticia para seguir la evolución. Ha de recurrir a créditos bancarios en un momento que, también en Italia, el grifo está cerrado. Apenas gotea.
 
Para seguir creciendo necesita obtener apoyo financiero externo. De ahí surge el rumor de la posible compra  por parte de Fiat. Idea nada descabellada en un país orgulloso de su historia, de su inventiva, de su diseño y de su industria. Fiat acaba de hacerse con la totalidad de la americana Chrysler. Su crecimiento multinacional está en auge. En esa expansión tiene perfecta cabida la inclusión de la marca motociclista más emblemática de Italia. La auténtica Ferrari de las dos ruedas. Un patrimonio nacional que Fiat puede cobijar para impedir que vuelva a caer en manos extranjeras. El “made in Italy” es orgullo de país. MV Agusta el portaestandarte del sector. El todopoderoso imperio Fiat Agnelli, el garante de la perpetuidad de la marca fundada por el conde Domenico Agusta. El Enzo Ferrari de las motos.
 
El pasado verano, Mercedes-Benz entabló conversaciones con Castiglioni. Ahora es deseable que cristalice el rumor de la empresa turinesa y ver cómo Fiat entra en el sector motociclista con tanta poesía histórica como aporte de recursos para legar a su país, y al mundo entero, la continuidad de una marca que ha basado sus éxitos y razón de ser en la alta tecnología. Así la creó el Conde Agusta y así la han relanzado los Castiglioni. Claudio y Giovanni. Padre e hijo unidos por un sueño común. El mismo que ha de cautivar a Fiat para apadrinar el sólido futuro de MV Agusta.