Honda Forza 300: ¿cuáles son sus directos rivales?

Un scooter es un vehículo utilitario. Debe ser capaz de llevarte de forma cómoda a ti y las cosas que necesitas en ese trajín diario. Tiene que ser económico de consumos, fácil de llevar y con prestaciones suficientes para moverse por ciudad, pero también para una esporádica salida unos kilómetros fuera de la urbe. Si lo defines así y eliminas el resto de consideraciones sobre si es más o menos divertido, si tengo o no tengo carnet para llevarlo, verás cómo coincides conmigo: entre 20 CV y 30 CV, entre 150 kg y 200 kg, con asiento grande, buen hueco bajo el asiento y otros equipamientos que me harán la vida más fácil (reloj de hora, caballete central y pata de cabra son básicos) son los elementos que definen al scooter perfecto. Y esto es perfectamente válido en el caso de un 300 «de libro».

Yamaha, con el Versity 300 hace muchos años, fue pionero en este segmento. No caló en España a pesar de su lógica. Lógicamente, eran años en los que se pagaba impuesto de matriculación solo en las motos de más de 250 cc. En un mercado repleto de scooters hasta 250, este 300 se acercaba en precio a un 400, pero se quedaba demasiado cerca más prestaciones de esos 250 cc. Más tarde presentó sus credenciales KYMCO, cuya versión media del Super Dink no era un 250 cc como hasta la fecha, sino un 300. Y fue, como todavía puedes ver por la calle, un gran éxito, ya que costaba lo que un 250, corría algo más y cumplía con creces toda esa lista de características que aquí arriba hemos añadido para el scooter perfecto. Ello supuso que ahora tengas que «rebuscar» para encontrar un 250 cc y, sin embargo, abunden los 300.

Ahora acaba de aterrizar el Honda Forza 300. También cumple con todos esos requisitos, e incluso algunos más. Emplea el motor del Honda SH 300, un propulsor que realmente no cubica 300 cc, sino que se conforma con 279 cc, un «truco» que sirvió par convertir muchos 250 cc en 300 cc, aumentando sobre todo el par y la respuesta. Este Honda Forza 300 destaca sobre todo por un nivel de equipamiento superior a sus rivales: control de tracción, llave de proximidad, pantalla regulable eléctricamente y numerosos «gadgets» más. A nivel mecánico, además de ese motor 279 cc, equipa el chasis y parte ciclo del 125, por lo que es un 300 bastante ligero y, sobre todo, muy compacto y ágil, manteniendo una elevada comodidad y capacidad de carga.

El Honda Forza 300 se enfrentará a una buena cantidad de competidores, muchos de ellos con tan buenas condicones como él y también a algunos otros scooters de otras categorías que el comprador estudiará antes de decidirse. Nosotros, en esta lista de rivales que te presentamos, hemos considerado todos los 300 del mercado que creemos serán sus rivales, pero tenemos que hacer unas excepciones.

Hay 300 ahora en el mercado que realmente vienen a ocupar el puesto de anteriores 200 o 250. El Beverly 300, por ejemplo, es una versión económica del 350, con un nivel de potencia inferior a estos rivales. Es más bien un scooter urbano, superior a un 125 cc, pero por prestaciones y precio se queda más donde estaría un 250 que estos 300. Algo similar ocurre con el KYMCO Grand Dink 300: ni por precio ni por prestaciones está al nivel de los 300 de esta lista, puesto que KYMCO ha querido ocupar con su nuevo Super Dink 350, verdadero sustituto del anterior Super Dink 300. Asímismo, hay ahora otro 350 que consideramos no debe incluirse: el BMW C400 X. El alemán es un 350, pero su precio e intención es competir en el segmento de los 400, del que toma el nombre. Aclarado este punto, veamos los rivales del nuevo Honda Forza 300.

Honda Scoopy SH 300 (5.750 €)

El primer rival del Honda Forza 300 lo tiene en su propia casa y emplea su propio motor. El Honda SH 300 es un scooter bien equipado, emplea el mismo motor que el Forza y es algo más ligero. A su favor, es un scooter bien conocido y con fama de fiable, cómodo y estable, si bien esa fiabilidad casi puede extrapolarse al nuevo Forza. Este último, a cambio, es un scooter menos visto, muy atractivo y gana al Scoopy por goleada en capacidad de carga, además de estar mejor equipado, con control de tracción y la pantalla regulable. Es, en el fondo, una opción más GT que solo penaliza contra el SH 300 en la ausencia de las ruedas altas, aunque no te engañes, porque el Scoopy monta llantas de 16″ y el Forza de 15″ en el tren delantero. Además, la diferencia de precio es de 50 € a favor del SH. No será el precio en que te lleve de uno a otro.

Kawasaki J 300 (5.450 €)

Kawasaki empleó durante muchos años la excusa de ser una marca de motos y no de scooters para no entrar en este segmento de mercado. Cuando se estrenó, lo hizo de la mano de KYMCO, marca que les fabrica, con el chasis y el motor del precedente Super Dink 300, este J 300. Disponible en versión normal o SE en colores «de guerra» Kawasaki por unos 150 € más, el J 300 es un scooter con estilo sport, de buen andar, aunque el motor KYMCO 300 acusó bastante la llegada de la Euro 4 y se vió obligado reducir sus prestaciones. Aún así, es un scooter rápido y con excelente parte ciclo, con menor capacidad de carga que el Honda a pesar de una carrocería mayor. Tampoco en equipamiento el Kawasaki iguala al Forza, pero es más barato y, sobre todo, el J 300 declara 3 CV más, que en estas cifras de potencia supone más de un 10% de ganancia.

KYMCO Super Dink 350 (4.999 €)

KYMCO fue la primera marca en convertir en éxito un modelo de 300 cc de la cilindrada. Con la llegada de la normativa Euro 4, KYMCO apostó por recuperar las prestaciones de su antiguo 300 y elevó la cilindrada del nuevo Super Dink hasta los 321 cc reales. Así consigue los 29 CV que declara y unas prestaciones muy interesantes, con mejor par y respuesta que sus rivales. Se trata de un scooter bien equipado, con aspecto y pretensiones de «Premium», lo cual cumple sobradamente, a pesar de un precio por debajo de los 5.000 €. Con todo ello, se convierte en uno de los paquetes más atractivos del segmento. Comparado con el Forza, el KYMCO tiene una respuesta más contundente (42 cc más se hacen notar) y un precio muy llamativo. El Forza por su parte es más compacto, igualando (incluso mejorando) su capacidad de carga, por lo que es equivalente en comodidad, pero más ágil en ciudad. Tampoco el equipamiento del KYMCO alcanza el nivel de auténtico lujo del Honda.

Piaggio Beverly 350 (5.849€)

Piaggio se encontró con el problema de que sus 300 de primera generación, un 250 QUASAR de años atrás, no alcanzaba los niveles de potencia de los 300 actuales. Esto ocurrió al tiempo que se necesitaba también jubilar su 400 cc del antiguo X8 y X-Evo. La solución fue crear un nuevo 350 que rozase la potencia de un 400, con el peso de un 250 cc. Este motor, de 330 cc, se montó en el X10 y también en este Beverly. Con ese nivel de potencia (30 CV en versión ya Euro 4), rueda delantera de 16″ y un chasis de mucha calidad, el Beverly cumple lo que promete en el nombre «Sport Tourer» con el que se presentó, ya que te será cómodo en trayectos largos o cortos, dentro o fuera de la ciudad. Y puestos a buscar prestaciones máxima se comporta, se tiene y resulta rápido y deportivo. Con el Honda, las prestaciones del Beverly quedarán por encima, es igualmente ágil y compacto, y equipa ASR, un antecesor más tosco, pero efectivo, del control de tracción. Eso sí, no el resto del equipamiento es equiparable ni su capacidad de carga. Su precio, además, es algo más alto.

SYM Cruisym 300 (4.799 €)

SYM convirtió hace años su GTS 250 en GTS 300. Éste después pasó a ser Joymax, también con ese motor que compartía con el Citycom 300. Ese propulsor, muy evolucionado y potenciado, es el que se emplea en último scooter en llegar a este segmento, sin contar al Forza: el SYM Cruisym 300. Se erige como un scooter de líneas modernas, bien acabado, potente y compacto que pondrá las cosas difíciles a todos los competidores del segmento, ya que su precio es el más contenido de todos: 4.799 €. Hablamos de mil euros menos que el Honda, con un equipamiento que no llega al nivel del Forza, pero que también es de altura en un scooter que declara 30 CV y muestra buen andar en todas las circunstancias.

Yamaha X-Max 300 (5.799 €)

La historia de Yamaha con los 300 es curiosa: tras el fracaso comercial de aquel Versity y el éxito de un X-Max 250 que no se quedaba lejos en prestaciones de los 300 más punteros, Yamaha se pensó muy mucho si volver a esa cilindrada. Cuando lo ha hecho, con el X-Max 300, ha conseguido uno de los scooters más equilibrados y acertados del mercado. Se define como un scooter que comparte aciertos con el Honda, es ágil y compacto, empleando el mismo chasis que el 125. Además es elegante y tiene un equipamiento lujoso, como muestra su control de tracción, llave de proximidad o el faro LED. Le falta, a comparación del Honda, el reglaje del parabrisas eléctrico y algún otro detalle, pero también añade un enorme hueco bajo el asiento. Supera al Honda en potencia, con 2 CV más (27) y le iguala en precio. Un rival duro para el nuevo Honda Forza 300.