Nos subimos a la nueva Ducati Hypermotard SP/ Hypermotard 2013

Hasta el circuito de Ascari Race Resort en la localidad malagueña de Ronda nos hemos venido a descubrir lo que Ducati nos tenía preparado. Y no ha sido poco. Un escenario casi paradisíaco, en el que todo el glamour de Ducati alcanza su máximo esplendor. Y en esta ocasión la exclusividad de Ducati se nos ha manifestado mediante su nueva SuperMoto, la Hypermotard, tanto en su versión básica como en la SP. Una evolución que mejora el rendimiento de la versión anterior gracias al empleo de últimas tecnologías y soluciones, a la vez que incrementa la versatilidad, ofreciéndonos un uso algo más polivalente, siempre dentro de la radicalidad de una moto de estas características.
En principio, el circuito Ascari –personalmente el trazado que más me gusta de los circuitos españoles-, y sus rapidísimos 5.400 metros de cuerda, puede que no parezca el lugar más idóneo para rodar con una moto así. Quizás por eso, nos dejaron la versión «corta» del circuito de «solo» 4.200 metros. De esta manera, los 110 CV declarados de la Hypermotard SP, se mostraban más que de sobra para disfrutar más que con ninguna moto deportiva, haciendo caballitos, derrapadas y mil y una diabluras. Por las carreteras de Serranía de Ronda, tuviemos ocasión de pasearnos sobre la HyperMotard normal
Lógicamente, la Hypermotard y la Hypermotard SP son prácticamente la misma moto. Se diferencian en la gama de colores, y como es habitual, en algunos de sus componentes. Como las llantas Marchesini forjadas en la SP, o las suspensiones, que en la normal no son regulables delante –detrás solo extensión y precarga- y sin embargo en la SP, total totalmente ajustables delante y detrás. Gracias a estos componentes, o al carbono, la SP pesa 4 Kgs menos que la básica – 175 Kgs contra 171 Kgs-. También los neumáticos son diferentes. Pirelli Diablo Supercorsa en la SP, y Diablo Rosso II en la básica.
También han trabajado aspectos fundamentales como la posición de conducción que ahora es menos forzada, y se ha aumentado la capacidad del depósito a 16 litros. Esto último si que era necesario. Y quizás lo más llamativo: adiós a aquellos curiosos espejos retrovisores plegables que salían desde los puños. Parece que la vuelta al formato convencional de retrovisores convence bastante al personal.
Y como no, en el precio, 12.490€ la básica, y 15.190€ la SP. En el próximo número de Formula Moto, encontrarás todos los detalles de la moto y de esta presentación. Y atentos a mi blog de la web, porque pronto saldrá una crónica muy especial y con sorpresas de lo que ha sido esta prueba. Os prometo que pasaréis un buen rato leyendo.