IV Barcelona Harley Days 2012

El cuarto de juegos

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El cuarto de juegos
Así nos sentimos los miles de motoristas que acudimos a la feria anual de Barcelona Harley Days, como niños con sus juguetes, en un gran cuarto de juguetes, en un gran cuarto evento que se celebra a las faldas del Montjuïc y que volvió a ser todo un éxito de participación motera.


La Ciudad Condal ha vuelto, y ya van cuatro, a convertirse en la capital mundial Harley-Davidson. Entre las autoridades que presentaron se encontraba Matt Levatich, President & Chief Operating Officer de Harley-Davidson Motor Company, o lo que es lo mismo, el gran jefe de la compañía americana. Josep Grañó, Director General de Harley-Davidson en España y Portugal expuso a los presentes todo lo que se podía disfrutar en el evento de 2012 y se hizo acompañar de Alberto Fernández-Díaz, vicepresidente primero de la Diputación de Barcelona, por cierto, -hablista- convencido.

Nuestros juguetes son grandes, pesados, cromados, calientes, coloridos. No hay demasiado plástico. Recuerdo haberle regalado a mi sobrino alguna vez un tambor; el niño encantado, mi hermano no tanto. Pero en Barcelona aceptan bien el bramido de la Harley, nuestros juguetes. Y hay muchos, más que en la noche de reyes. Una cabalgata sonora, mágica como sus altezas de oriente, siguiendo la estrella naranja y negra que deja su estela hasta la Plaza de España de Barcelona.
 
Muchos han seguido esa estela. Nos consta que del Lejano Oriente llegaron un grupo de motoristas de Arabia Saudí, de Jordania y de Rusia. De la misma dirección: italianos, balcánicos- Del norte, más vecinos europeos. Y allende los mares, amigos de América, norte, sur, central-
 

13 km de motos y banderas
 
Evidentemente, el belén estaba superpoblado por españoles llegados de cualquier área de la piel de toro. Al lado del maltratado coso turino de Barcelona se fueron arremolinando la máquinas cromadas que llegaron a ser miles, sobre 21.000 según los organizadores.
 
Después de la gran afición motoristas con la moto aparcada -léase tomar cerveza- había decenas de actividades a las que acudir, estando algunas de ellas solapadas en el tiempo. Quizá la más atractiva eran las rutas guiadas por las carreteras de Cataluña, de enredados giros y bellas panorámicas, sobre todo del Garraf. Unos 500 -hierros- alborotaron la tranquilidad payesa.
 
Con las motos de protagonista, hubo otra actividad sobresaliente y de gran acogida popular: el desfile de banderas con 15.000 motos de todo tipo, pero con masiva presencia de las de Milwaukee. Todas ellas en armonía rodaron por unas decenas de kilómetros por las calles de Barcelona. La caravana alcanzó los 13 kilómetros, como en la edición anterior.
 
Como en el ajedrez, el Rey es el más importante del juego. Aquí igual: Elvis se reencarnó y nos ofreció desde el escenario sus mejores melodías: -The King is back- by José Sanabria, Aubie Burr & The Elvis Tribute Band y el británico Ben Portsmouth coronaron durante tres días al monarca de Tupelo.
 
¡Hagan juego, señores! Y la apuesta ganadora fue 72. El último modelo de Sportster fue la protagonista con un stand dedicado exclusivamente a esa belleza. Un concurso de diseño gráfico con su tanque como soporte adornaba gran parte de la superficie, mientras estaba completado por un trozo de playa y otros modelos sobre la fina arena. Enfrente, el artista Pacen Dave pintaba en directo, junto a su hermano Alex, un depósito de combustible delante del público. Muy interesante actividad para lo profesionales del custom.

Como siempre
 
El juego más dinámico fue el Jumpstart, o conducir una Harley sobre rodillos, simulando un tramo de carretera. Fitshop permitió customizar una Harley en cuestión de segundos con un catálogo de piezas de H-D. Las colas más largas te acercaban al Demo Rides, donde los profanos en este mundo podían sentir la vibración el bicilíndrico en uve bajo su anatomía.
 
Todos hemos jugado a vaqueros de pequeños y aquí se juntaron 1.200 a bailar al unísono música country, un acontecimiento que batió récords.
 
Para los aficionados las customización, en Bike Show es el momento de más disfrute. Se pone en juego el talento de los creativos de la chapa, del cromado, de la pintura, rotulación, aerografía- La ganadora del evento fue una Electra Glide Centenario reconvertida en Bagger de suaves líneas, color berenjena y adornada con el enemigo de Batman que da nombre al aparato: Dark Jokester. Su orgulloso propietario de Tarragona recibió la placa de manos de Grañó y de Levatich. Otra docena de Harley fueron premiadas y aplaudidas bajo el potente sol condal.
 
Miles de Harleys marcaron territorio en el evento urbano de Harley más importante de Europa, que cada año toma más fuerza. 20 nacionalidades diferentes firmaban sus matrículas, pero todos jugando limpio, con respeto hacia los lugareños que los acogieron amablemente, como siempre.
 
Texto: Nacho Mahou
Fotos: J. C. Orengo