Cuando circulamos por la noche en vías insuficientemente iluminadas, nos empeñamos en pensar que vemos lo suficiente con la luz que proyecta nuestra motocicleta. Nada más lejos de la verdad.

Normas básicas de conducción nocturna

Alumbrado de cruce y carretera
Normas básicas de conducción nocturna
Fórmula Moto
Fórmula Moto


Alumbrado de cruce y carretera

Todo atiende a una lógica. Esa percepción de falsa visión es consecuencia de la localización en el escenario de determinados estímulos exteriores que sirven de guía y orientación durante la conducción.

Debemos aprender a interpretar y a utilizar las referencias que nos proporcionan, cuando menos, los vehículos que circulan en el mismo sentido por delante de nosotros, los que van en sentido contrario, las marcas viales de delimitación de calzada y de separación de carriles, las señales verticales, los paneles direccionales, los captafaros de barrera, ojos de gato e hitos de arista.

Para nuestro análisis de riesgos durante la conducción, a estos estímulos incorporaremos otros como, y a modo de ejemplo, las placas de matrícula, reflexivos portados por los peatones, los ojos de algunos animales, etc.

Pese a todo lo anterior, ver una señal de tráfico en la noche a 60 metros es posible, ver a un peatón o animal es imposible salvo que porte algún elemento reflexivo.

Es por todo lo anterior que las referencias visuales localizadas fuera del campo de visión directa de nuestro proyector son tan sólo orientativas y deben de ser confirmadas cuando entren en el espacio de iluminación.

En conducción nocturna sé inteligente y adapta la velocidad a la distancia real de visión directa (entre 40 y 50 metros en las mejores condiciones). A 120 km/h, nadie puede detener su vehículo dentro de su campo de visión directa con el alumbrado de carretera.