Una noche, viendo una película en Antena 3, me decidí escribir mi blog de esta semana y sobre qué trataría.

¿Para qué estás en la vida?

Blog de Ismael
¿Para qué estás en la vida?
Fórmula Moto
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Morgan Freeman en -The code- – que no es un peliculón, pero se deja ver y entretiene- hay un momento que le dice a Antonio Banderas algo así como -hay gente que viene al mundo para diseccionar el átomo; yo he nacido para robar-. ¿No me digas que no es una frase que da mucho que pensar? Yo desde luego me quedé un buen rato dándole vueltas -al rulo-, y preguntándome, ¿para qué coño estoy yo en la vida? La verdad es que nunca me lo había planteado, pero es que estoy muy filosófico últimamente, y las posibles respuestas me llevan a su vez a otras preguntas.

*Aviso: no apto para los que se coman mucho el coco.

¿Acaso estoy en el mundo para ser piloto de motos? Bueno, quizás hubo un tiempo que esa podría haber sido la respuesta correcta, pero evidentemente, a mis casi 32 años, y aunque sigo haciendo carreras por diversión, lo que no haya triunfado aún difícilmente lo voy a hacer ya en el futuro. Y menos aún con la ristra de huesos rotos que arrastro de mis más de 100 caídas en mi vida deportiva. (¡Sí, más de 100!, hice recuento hace poco y hasta yo mismo me asusté) . Así que no, no es para eso, seguro-

¿Estoy en el mundo para ser probador de motos? La verdad es que colaborar con Formula Moto como probador es una experiencia indescriptible e impagable. Es un privilegio poder probar de los primeros, y en exclusiva, los últimos modelos deportivos del mercado en cualquier lugar exótico del mundo, y encima poder compartir mis sensaciones con todos nuestros lectores. Y la verdad, montar en moto para después escribirlo, pues creo que no se me da mal del todo, para que engañarnosJ.  Pero creo que tampoco va a ser esta la respuesta…y eso que estoy encantado con esta faceta mía, pero las cosas en el mundo de la moto están regulares y, entre otras cosas, la actividad para los probadores ahora se ha reducido bastante. Además, imagino que algún día esto terminará, al menos para mí-aunque espero que aún quede bastante.

¿Quizás para ser empresario? Bueno, podría ser. De hecho es la carrera que estudié en la Universidad, aunque estudiar, lo que se dice estudiar-poquito. Creo que copiaba más que estudiaba, pero eso es otra historia. El mundo de los negocios siempre me ha atraído, es cierto, y al margen de nuestra empresa familiar -una fábrica de electrónica a la que tengo infinito que agradecer-, yo personalmente he hecho algún intento por mi cuenta de montar algún tinglado. Pero con más pena que gloria, la verdad-quizás algún día. Pero tampoco estoy seguro que esté aquí para esto.

¿Entones para qué he nacido yo? Pues la verdad, no lo se, pero para algo tiene que ser. Creo que todos deberíamos estar aquí con algún fin y no simplemente -de tránsito- – o eso quiero pensar-. Sí, ya lo se, lo típico: tener una familia, perritos, una casa, una hipoteca, bla, bla, bla-todo eso cuando llegue el momento de cada uno, si es que llega  y, por supuesto, son cosas importantísimas. Pero no me refiero a este tipo de cosas. Yo creo que debe haber algo más íntimo y personal que todo esto que debe hacernos tener ilusión y motivación por seguir adelante: proyectos, retos, metas-cada uno la suya o las suyas. No se si me explico, pero yo me entiendo. Y como yo aún no estoy seguro en mi caso de que puede ser, mientras tanto seguiré esperando a encontrarlo y disfrutando la vida-a ver qué nos trae la marea.

Y tú, ¿sabes ya para qué has nacido?

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