A vueltas con la velocidad y- no merece la pena.

Resulta que hace unas semanas, circulaba yo tranquilamente por Madrid con mi coche ranchera, cuando veo que una Berlingo decorada de un crematorio de mascotas, se pica conmigo en un semáforo. -¡¡¿Cómo?!! Este tío no sabe lo que esta haciendo- me digo. Resultado: le hice un exterior en una curva un poco delicada, pero el coche no entró en dicha curva. Y lo peor de todo, es que el semáforo que estaba en el exterior (y que me vio venir de sobra) no se quitó de mi trayectoria, así que le pasé por encima. La próxima vez seguro que se aparta. Bueno, lo peor de todo no fue eso, lo peor fue cuando el -piloto- de la Berlingo, se paró a mi lado, se -descojonó- de mi y siguió su marcha. Me lo merezco. Real como la vida misma.

A los pocos días (con mi coche ya en labores de chapa y pintura), venía de recoger el flamante coche nuevo de mi padre del taller, de una revisión rutinaria. Es cierto que en la R5 le apreté -un poquito-, pero al llegar a la M-40, empiezan a encenderse luces de alarma. Resultado: motor roto, muy roto y una reparación de 5 cifras que espero se haga cargo la garantía, o mi padre puede que me desherede.

Como resulta que el coche antiguo de mi padre también estaba roto -y ahora también el nuevo- y en mi familia empezábamos a quedarnos sin vehículos, tuvimos que pedir prestado uno a un amigo, que, además, es quien suele arreglarnos los destrozos que montamos en nuestros coches. El caso es que entre mi padre y yo lo tuvimos cerca de un mes. Pues resulta que me llama un día mi amigo para que me pase a verle, que tiene un par de -recetas- para mi y que le -afloje la gallina-. Le pregunto de qué son y mi sorpresa: los dos del mismo radar en los túneles de la M30 ¡a 72 Km/h! ¿Vosotros habéis ido a 70 km/h por los túneles? No me digáis que no parece que te puedes bajar del coche y salir corriendo a pie más rápido.

Al margen de estas dos, estoy en rueda con unas cuantas más de la ORA, y otra por ir a 150 km/h en la Radial 2 un jueves a las 11:00 AM. ¡UHHH, qué peligroso! Por cierto, cuidado con el radar trípode que ponen en el km 48 dirección Barcelona. No se ve.

Todo este ladrillo, ¿para qué? Porque aunque probablemente yo no sea ni de lejos la persona más indicada para hacer este tipo de sugerencias visto mi historial, lo cierto es que en la carretera y en la ciudad realmente NO MERECE LA PENA, ni correr más de la cuenta ni picarse con nadie. Bien por lo peligroso que resulta -en vez de un semáforo podía haber sido una persona, y no estaría hablando en estos términos- o bien por la sangría económica que te pueden montar -esos que velan por nuestra seguridad-. ¿Y entonces? Pues entonces habrá que optar por lo que en Formula Moto llevamos abogando tanto tiempo: tener paciencia (odio esta palabra) en la carretera y desfogarse en circuito, en tandas libres, o cursos de conducción para los noveles. Y aún con más motivo en moto que en coche. Los que ya lo habéis probado no tengo que explicaros nada, y los que no, probadlo y luego me contáis.

Para conocer un poco más a fondo Ismael no te pierdas esta selección de sus mejores vídeos:

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