Mantenimiento de la moto: Qué es y para qué sirve la precarga de la suspensión trasera

Si lees revistas de motos o scooter, si te informas por internet o, simplemente, has oído hablar del tema, a lo mejor lo de la «regulación de precarga del amortiguador» te suena un poco a chino. No es algo que se entienda así, sin más, si no te lo han explicado o sin tener previamente algún conocimiento sobre el tema suspensiones. Pero en el fondo es sencillo y, sobre todo, muy práctico.

Todas las motos o scooter del mercado actual llevan suspensión trasera mediante amortiguador. Este, ya sea uno central o lateral, con o sin bieletas, o mediante dos amortiguadores (uno en cada lado), tienen esa «precarga». Y no me refiero ahora a la regulación; en algunas motos o scooter no puedes regular dicha precarga y será invariable, es decir, la prefijada por el constructor del amortiguador.

Precarga es, como la propia palabra indica, la carga inicial del muelle del amortiguador. Este tiene un cuerpo telescópico dentro, con el aceite y sus mecanismos, y por fuera añade un muelle que ya de por sí está comprimido entre los dos topes del amortiguador. Por tanto, si sacásemos el muelle de sus alojamientos, saltaría, porque ya está apretado. O lo que es lo mismo: cuenta con cierta precarga.

Para qué sirve regular la precarga

Esta precarga se ha calculado, cuando no hay regulación, para que el vehículo que sea (moto o scooter), mantenga cierta altura de la parte trasera en parado, y para que baje un cierto nivel cuando se pasa un bache o cuando se suma la carga de pasajero y equipajes hasta cierto límite.

Hay tipos de motos en los que es especialmente interesante poder regular esa precarga inicial. Por ejemplo, en motos de Gran Turismo, con las que pueden rodar a veces solo con el conductor, otras con conductor y pasajero y otras incluso con equipaje para largos recorridos; o en motos deportivas, en momentos que te interesa mayor dureza inicial del amortiguador; o motos de campo, en zonas con muchos saltos, por ejemplo.

Pero esta posibilidad está más extendida entre motos y scooter de todo tipo de lo que generalmente se cree. Y al margen de otros factores menos relevantes, en todas está relacionado con la posibilidad de llevar más o menos carga. Si ruedas solo o acompañado, tu propio peso o el equipaje pueden requerir un poco más o menos de precarga. O simplemente, quieres rodar relajado, vas solo y haces un recorrido sobre una carretera muy bacheada, entonces sueltas un poco y el amortiguador quedará más blando para una conducción más confortable.

También tiene implicaciones sobre cómo se comporta la moto. Por ejemplo, como norma, cuando rodamos con acompañante es aconsejable aumentar la precarga inicial para que no cambien las geometrías de la moto, bajando la parte trasera y perdiendo agilidad e incluso haciendo la dirección menos sólida. Si endureces cuando llevas pasajero, el comportamiento dinámico se parecerá más a cuando vas solo, ya que al endurecer el muelle de la suspensión trasera, la moto se agacha menos de atrás.

E incluso en conducción deportiva lo notarás: una suspensión trasera más dura en su inicio hace que la moto, al abrir gas, tenga menos tendencia a levantar el morro, pero tendrá menos capacidad de absorber baches, y, por lo tanto, puede empeorar en tracción. En este caso, es cuestión de compromisos y encontrar un equilibrio.

Cómo se regula la precarga

Si no queremos ser «técnicos», podemos decir que endurecer o dar más precarga es lo mismo que «apretar el muelle» del amortiguador o amortiguadores. Hay tres maneras principalmente de hacerlo. Las tres tienen el mismo efecto y lo único que cambia son las herramientas necesarias, cómo se ven sus componentes desde fuera y cómo se accede al sistema.

• Amortiguadores almenados: Es el sistema más común en scooter, motos con dos amortiguadores traseros y modelos con suspensiones más sencillas. En la base inferior del amortiguador, generalmente, hay una especie de «almenas» y escalones. Las primeras valen para enganchar ahí una llave que debe venir incluida en la dotación de herramientas de tu moto o scooter. Es un mango con una especie de semicírculo y un diente en la punta. Enganchando ese diente en las almenas, giramos el cuerpo del amortiguador y veremos cómo el muelle se «sube» a uno de esos escalones, apretándose más de lo que estaba. Tienes varios escalones, tantos como niveles de reglaje de precarga.

• Con rosca, tuerca y contratuerca: Es típico en motos deportivas, cross, enduro y similares. El amortiguador (generalmente central) lleva una rosca fina rodeando toda la parte superior del cuerpo del amortiguador. En ella, dos tuercas almenadas sujetan la posición del muelle. Una de ellas hace de contratuerca para evitar que, con el funcionamiento del amortiguador, la otra se mueva de donde la hemos dejado. La principal, la que está pegada al muelle, puede apretarse o soltarse a lo largo de toda esa rosca, regulando con mayor precisión que en el sistema anterior la cantidad de precarga que queremos. Esta operación se hace con una llave de punto, como la anterior, pero más grande.

• Con pomo: Generalmente las motos de gama alta, de estilo GT o Sport Turismo, llevan en un lado, cerca del asiento, un mando que gira hacia los lados. Este es un sistema similar al anterior, poco extendido por caro, pero muy cómodo y sencillo. Girando el pomo conseguimos que el muelle se apriete de forma similar a un sistema de tuerca y contratuerca, pero con esta comodidad añadida.

Suspensiones electrónicas

Las suspensiones electrónicas de última generación que incorporan algunas motos de gama alta también tienen «precarga», como es lógico. Pero en este caso se realiza simplemente mediante controles electrónicos desde las piñas o el cuadro. El sistema de tuerca y contratuerca cuenta con un motor eléctrico que aprieta el muelle en las posiciones prefijadas para el sistema. Éstas pueden ser, en algunos casos, designadas por «modos»: Sport, Touring, etc, por niveles de carga, con símbolos como un casco, dos cascos para el número de ocupantes y una o varias maletas si llevas equipaje. En otros casos, simplemente se designan los distintos reglajes de precarga con un número que puedes cambiar: precarga en nivel 1, 2, 3, etc.

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