Prueba Aprilia RX 125 y SX 125: recuerda tus 16
Se dice a menudo que a los chavales jóvenes ya les atrae menos la moto que las nuevas tecnologías, que sueñan más con móviles de última generación y «gadgets» electrónicos sofisticados que con vehículos de dos o cuatro ruedas. Yo no soy sociólogo y no sabría cómo analizarlo, pero sí sé que quedan muchos aficionados a la moto.
En Europa, las ventas de motos de 125 cc están creciendo. Y sí, hay una parte muy importante de ese mercado que es para «mayores», pero también es el sector del carnet A1, de la moto de los chavales de 16 años que llegan a este mundillo. Y el Grupo Piaggio es uno de los líderes europeos de este mercado: más de un 34% de las motos matriculadas en Europa son de una de las marcas de este grupo. Aprilia ha sido, y quiere volver a serlo, una de las marcas referentes en este segmento de mercado.
Las Aprilia RS, AF 1, Extrema y demás 125 de los años 80 y los 90 fueron referentes entre los jóvenes. En el off road, las Tuareg y más todavía las RX fueron también motos bien vendidas y populares. Más hacia acá en el tiempo, con la conversión a las 4T de 125 cc y 15 CV para el carnet A1, las RS 125 4 y las actuales Tuono 125 y RS también son motos punteras. Ahora llegan al mercado estas nuevas Aprilia RX 125 y Aprilia SX 125 para completar una de las gamas de «octavo de litro» más amplias en motos de marchas de altas prestaciones. Estas RX trail y SX supermotard heredan parte de esa historia de éxito. No puedes, con un nombre como Aprilia, hacer cosas «a medias». Por ello emplean el motor Piaggio de doble árbol de levas que alcanza los 15 CV que conocemos ya precisamente de esas RS y Tuono 125. Es la última versión, por supuesto ya Euro 4, de aquel motor que también empleó la primera Aprilia RS 4 125 y también Derbi en sus GPR y Senda DRD 125. Y como última versión se le nota más suave y redon-do que aquellos primeros.
No solo el motor es compartido por aquellas motos españolas. Derbi, como sabes, también pertenece desde hace años al grupo Piaggio, y en una operación que ya hemos visto en más ocasiones en Piaggio (recuerda las Gilera GP 800 reconvertidas en Aprilia SRV 850 o las Derbi Rambla 300, anteriormente Aprilia Sport City), las nuevas RX 125 y SX 125 parten de una base ya conocida en cuanto a chasis y otros detalles: aquellas Derbi Senda DRD 125 R y SM.
No tienes más que ver la moto y, si conociste aquellas Derbi, verás que las semejanzas no se pueden ocultar. Siguen, además, su misma filosofía, con motor de 15 CV, una parte ciclo eficiente aunque no disparatadamente cara, una estética moderna y actual y, ante todo, diversión a raudales para el que se sube encima.
CÓMO SON LAS APRILIA RX 125 Y SX 125
Ambas 125 son dos motos en una. Tanto Aprilia SX 125 como Aprilia RX 125 comparten chasis, carrocería, motor e incluso suspensiones. Solo se diferencian en las ruedas. Llantas, frenos, neumáticos y transmisión final son las piezas que convierten una RX en una SX, y viceversa. La primera, la RX, es una trail muy campera, una moto de las que podemos denominar trail-enduro, ya que su enfoque es completamente off road, aunque capaz de salir a la carretera sin mayores problemas.
Con llanta delantera de 21″ y trasera de 18″, porta ruedas off road de tacos, capaces (como se ha demostrado en esta presentación realizada en Alemania) de rodar por asfalto. La SX, a pesar de emplear también llantas de radios, opta por unidades de 17″ en ambos trenes con neumáticos de asfalto, en una moto de uso solo en asfalto, muy ágil en ciudad, eficaz en curvas y endiabladamente divertida en el circuito de karts en el que la probamos.
La moto emplea un chasis perimetral el acero. Muy rígido, otorga a la moto además de un comportamiento muy noble en cualquier circunstancia, una apariencia de moto off road de mayor cilindrada. En el tren trasero, sobre un basculante también en acero (por formas parece un más sofisticado elemento de aluminio), encontramos una suspensión sobre bieletas muy eficaz y delante una horquilla invertida también de gran apariencia, de 41mm de diámetro, equipo que ha demostrado durante la prueba un funcionamiento impecable. Ahora bien, Aprilia ha querido darle la apariencia de una moto grande a estas RX y SX, lo que ha conducido a una altura de asiento en la RX similar a la de una enduro de verdad, como una 450, y a un peso de unos 135 kilos. Esas 250 y 450 de chasis perimetral emplean aluminio, con lo que rondan los 115 kg para unos 35-55 CV. Ésta es de acero y ofrece 15 CV.
En los frenos, la RX equipa discos ondulados con un delantero de 260 mm, mientras que en la SX hay un disco de perfil convencional de 300 mm. Las dos montan un ABS monocanal, de los que actúan únicamente sobre la rueda delantera. Es una opción muy inteligente en estas motos, porque no solo ahorras dinero al no necesitar un sistema de desconexión, sino que en ambos usos, en enduro o supermotard, permite deslizar de atrás y frenar de forma normal, como se hace de forma habitual en estas disciplinas, sin arriesgarte a deslizar la rueda delantera. También la corona trasera cambia, con 69 dientes para la RX y 62 para la SX. No solo el diferente uso de la moto recomienda esta variación, sino que también el diferente diámetro de rueda requiere diferentes coronas para mantener un desarrollo de transmisión adecuado.
El equipamiento es el justo que puedes esperar en motos off road. Incorporan, al menos, llave de contacto con bloqueo de dirección, algo no muy frecuente en motos off road auténticas. También el tapón de gasolina es con llave. La RX es una moto de campo, pero pensada para usarse también en el día a día en ciudad, lo que recomienda estos acabados.
Sí que cumplen más de cerca con otros equipamientos clásicos en off road. La pata de cabra equipa muelle y no desconexión de motor, algo que rodando sobre baches es importante, ya que impide que se si despliega se quede abajo. Y el cuadro es una simple pantalla digital, estrecha y rectangular, donde puedes leer la velocidad, kilometrajes, temperatura del agua del motor y poco más. En las luces, solo porta el piloto trasero de LED, siendo las demás de bombilla estándar.
CÓMO VAN LAS APRILIA RX 125 Y SX 125
No hace todavía 24 horas que estaba subido en la RX recorriendo carreteras comarcales alemanas, cerca de Dusseldorf y Bonn, y menos todavía desde que rodé (y me lo pasé pipa) con la SX en una pista de karts en la misma zona. Por ello, tengo los recuerdos de las sensaciones que transmiten muy frescos y te puedes asegurar que son muy positivas en ambos casos.
Menos frescos tengo los recuerdos de las veces que probé las Derbi Senda DRD, pero como con éstas hice unas cuantas pruebas en su momento, sí que tengo todavía algún recuerdo: puede ser que estas Aprilia deriven de aquellas, pero desde luego han mejorado mucho. Empecé rodando con la RX, la versión enduro de la moto. Nada más acercarte a ella, llama la atención su tamaño: es una moto muy alta y aparente. Yo, con mi 1,65 m, desde luego no llego salvo que me quede «a medio subir», con solo la pierna por encima del asiento, la primera ya metida y el embrague cogido. Una vez que sales, baja algo de suspensión y entonces ya sí soy capaz de llegar de puntillas con un solo pie. La moto, además, pesa, unos 134 kilos según nos confirmaron (en la información oficial no declaran peso). Pero este peso está bien repartido y no lo notas demasiado. De hecho, se percibe bastante ligera. Sales en primera y las diferencias con aquella antigua Derbi son evidentes: vibra menos, suena aguda y potente, y denota mayor calidad general.
Fotos de la Aprilia RX 125 2018
Los primeros kilómetros que recorrimos se sucedieron en asfalto mojado. Con neumáticos de tacos CST fui algo más que precavido, y lo cierto es que hay que tener cuidado con ellos en mojado, igual que con cualquier otro neumático de tacos. Unos kilómetros más adelante el suelo se secó y demostraron suficiente agarre en condiciones normales. No obstante, el zumbido que generan al rodar sobre asfalto demuestra que son neumáticos off road puros, no trail. Y si vas a usar la moto en el campo lo agradecerás. Si no, busca una opción de neumáticos trail de verdad, que tendrán mejor tacto, menos ruido y más agarre.
Aún con este zumbido de los neumáticos, la moto es my agradable. Anda bien, sube mucho de vueltas y el motor se nota que proviene de una deportiva como la RS 125. El desarrollo es más corto (como es lógico) que en las de carretera Tuono 125 y RS 125, pero es fácil verla pasar de 100 km/h. Ahí ya va muy alta de vueltas, pero se puede llevar más allá todavía. Frena muy bien y las suspensiones tienen un reglaje algo duro para una moto de campo (es el mismo que en las SX) pero que se agradece en la carretera al ser más firme a la hora de frenar o trazar curvas.
Me quedé con las ganas, sin embargo, de probar la moto más a fondo en el campo. Como verás en las fotos, hay una en un camino, pero fue un recorrido muy corto, y ello no es suficiente para decirte cómo va. Sí te puedo adelantar que se comporta como una moto de enduro a pequeña escala. Suspensiones de 240 mm de largo, con 15 CV para su peso no dan para grandes hazañas, pero lo suficiente para ir deprisa por caminos y pasar por sitios complicados a base de manos y buen pilotaje. Resulta una buen escuela, como debe ser. Eso sí, para este uso yo procuraría cambiar el aceite de horquilla y dejarla un poco más blanda en su primer recorrido. No son regulables, pero tiene solución. Seguimos con la SX. Unos pocos kilómetros por carretera, esta vez seca, y ya ves que se alarga un poco más el desarrollo. Sigue sin ser el de las deportivas RS y Tuono, pero sí un poco más que la RX. El freno delantero también cambia el tacto, siendo más seco, deportivo y potente, como debe ser. También es más fácil llegar al suelo con los pies, pero tampoco es una moto baja.
Llegamos a una pista de karts. Corta, muy revirada, con buen asfalto? hecha casi a medida para la SX, aunque se inauguró hace 50 años. Salgo a la pista con la confianza justa en los neumáticos CST, estos sí completamente de asfalto. Poco a poco te van dando confianza y te vas «picando» con otros compañeros. El motor, con sus 15 CV, necesita ser comprendido para ir deprisa. En las dos mini-rectas del circuito me doy cuenta de que es mejor meter más marchas que intentar estirarlo hasta arriba. Así ganas metros, ya que el desarrollo permite que la moto acelere antes. Llegas a las curvas, frenas con todo, reduces hasta 2ª en casi todas ellas (ya te digo, muy revirado), tiras la moto con toda tu alma y abres el gas con decisión mientras vuelves a llevar el pie a la estribera para meter, cuanto antes, 3ª.
Fotos de la Aprilia SX 125 2018
Me apaño mejor (no todos mis compañeros lo hacen) llevando la moto al estilo off road, con cuerpo erguido, pie afuera y tan solo tiran do la moto. No en vano, esta SX deriva de una moto de off road. Cuando intento hacerlo al estilo velocidad, más tirado e intentando bajar la rodilla, la noto menos firme, menos precisa. A mi manera, sin embargo, consigo meter la rueda delantera justo donde quiero, puedo frenar más tarde y más fuerte, y abrir gas con menos cuidado. Al poco, derrapadas, chillidos de ruedas, estribera rozando y diversión como con pocas otras motos podrás obtener. La conclusión es que los neumáticos CST van perfectos, y chasis, frenos y parte ciclo resultan rígidos, potentes y más que sobrados para esta moto. Y el motor es increíble con 15 CV. ¿Para cuándo un 300 cc?
Fotos: Volker Rost
