Cambio de disco de freno: te explicamos el proceso paso a paso

Cambiar el disco de freno de una moto es una situación por la que van a pasar todos los moteros. Unos optarán por el taller para no complicarse la existencia pero, para aquellos más ‘manitas’ también está la opción de realizar esta operación de mantenimiento por sí mismos. En ese sentido, como parte de su compromiso con la seguridad de los usuarios de dos ruedas, la marca catalana NG Brakes repasa cómo debe realizarse este procedimiento y por qué es importante que lo lleve a cabo un profesional.

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El uso de materiales de primera calidad, la apuesta por la constante innovación, la escucha del feedback de los usuarios y la presencia en alta competición son los principales pilares sobre los que se asienta NG BRAKES. Este fabricante de discos de freno lleva más de 25 años diseñándolos y produciéndolos, poniendo el foco en ofrecer siempre un producto de primer nivel que garantice la seguridad de los motoristas y sea accesible para todos.

Uno de los siguientes pasos a la venta (o compra) del disco de freno es su instalación. Una operación bastante rápida, pero meticulosa, que debe realizarse con exactitud para que no se produzcan fallos en su funcionamiento. Por ello, es imprescindible que siempre lo realice un mecánico profesional cualificado, con experiencia, que conozca el producto y el procedimiento. Si ya lo has hecho antes, no tiene porqué haber ningún problema -y te ahorrarás dinero-. Pero si te quieres quedar tranquilo, lo mejor es acudir a un especialista.

Qué pasos hay que seguir para cambiar un disco de freno

A priori puede parecer sencillo, pero la instalación del disco de freno requiere de una preparación y experiencia previa. Aquí te resumimos los pasos a seguir:

• En primer lugar, la moto debe colocarse en un lugar en el que se pueda mantener fija.
• Una vez fijada, es el momento de sacar la rueda trasera completamente. De esta manera, la moto queda fijada y el cambio se realiza en otra superficie, como una mesa, trabajando directamente sobre la rueda.
• El siguiente paso es sacar el disco de serie o el disco que se va a sustituir. Para ello, se desatornilla con cuidado. Una vez fuera, se guarda el disco y se procede a limpiar los tornillos. Es fundamental eliminar todos los restos de fijatornillos que tengan y dejarlos completamente limpios, para que puedan colocarse correctamente a continuación.
• Cuando ya se tienen los tornillos limpios, se coloca el nuevo disco (habiendo comprobado previamente que, efectivamente, es el correcto) y se vuelve a atornillar. Antes, se aplica fijatornillos en cada uno de los tornillos, para que el disco quede perfectamente fijado.
• Una vez fijado, se vuelve a montar la rueda, colocando bien la pinza, y se hacen las comprobaciones pertinentes para asegurarnos de que se ha colocado bien.
• A continuación, se repite la misma operación con la rueda delantera.
• Por último, es importante recordar que, al cambiar los discos de freno por unos nuevos, faltará frenada en el primer contacto con la moto. Por ello, es importante hacer alguna prueba en una zona segura, como un parking amplio, antes de volver a rodar.

La importancia de realizar el cambio en un taller especializado

Los motivos para acudir a un talle, colaborador oficial de NG Brakes, y no hacer este cambio uno mismo van desde el propio conocimiento del producto hasta la posible aparición de averías inesperadas:

• Conocimiento. Un mecánico formado y con experiencia tiene las herramientas para confirmar que esos discos son, efectivamente, los adecuados para nuestra moto y para el uso que vamos a darle.
• Precisión y profesionalidad. Si bien es cierto que es un proceso medianamente sencillo y rápido, a un usuario final sin conocimientos de mecánica le falta la precisión que ofrece un profesional y que es imprescindible para el correcto funcionamiento del disco de freno. Desde el apriete de los tornillos hasta la colocación de la pinza, cada detalle y cada milímetro son fundamentales.
• Detección de posibles averías o problemas en la moto. En un taller especializado, además de realizar el cambio de los discos de freno, el mecánico es capaz de detectar cualquier dolencia en la montura. Desde un tornillo que esté algo pasado u oxidado hasta algo más serio, como un problema en el sistema de frenado. Una detección temprana de estas averías, que fácilmente se le escaparía al usuario, puede evitar que la situación empeore y, por supuesto, que se produzca algún susto o accidente en carretera.
• Resultado de calidad y garantía. La tranquilidad que otorga realizar cualquier mejora, cambio o reparación en la moto en un taller profesional no tiene precio. Además de estar seguro de que el resultado va a ser inmejorable, el motorista tiene la certeza de que puede volver a acudir al mecánico si le surge alguna duda o si cree que algo no ha ido bien en el proceso.